CASTILLO DE MONFORTE DE LEMOS

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• Desde Lugo. (64 Km)
• Desde Orense. (48 Km.)

Monforte fue, en época medieval, un singular ejemplo de ciudad- fortaleza feudal, alrededor de un monasterio, con un castillo situado sobre un estratégico montículo (El Monte de San Vicente) y rodeado por un recinto amurallado salpicado de torres defensivas. A los pies del monte, el río Cabe, que daba vida al asentamiento. Del perímetro de la muralla, datada entre los siglos XIII al XV, todavía se conservan amplios tramos, tres torres y tres puertas de acceso a la villa. Del castillo sobresale la Torre del Homenaje, bien conservada y restaurada en su interior, desde su cima se divisa el valle de Lemos surcado por el curso fluvial del Cabe. La vista y el atractivo que tienen los castillos, hacen de esta, una parada obligada. 

TORRE DEL HOMENAJE

Construida entre los siglos XIII y XV, era el edificio más importante dentro del castillo, ya que en ella se celebraban las Ceremonias del Homenaje, rito que unía al señor con su vasallo. Es una atalaya de 30 m de altura, 13m de lado y muros de 3m de grosor. La torre y la muralla de la fortaleza medieval sufrieron importantes daños durante la Gran Guerra Irmandiña, (1467-1469), y fueron reconstruidas una vez finalizados los enfrentamientos.

Hoy el condado de Lemos forma parte de la Casa de Alba. Actualmente este edificio alberga parte de las dependencias del Parador de Turismo.

Texto de: http://www.monfortedelemos.es/es/contenidos.asp?sec=31&id=627

HISTORIA

 Desde el siglo XII aparece Gutierre Rodríguez de Castro como Tenente de Lemos y Sarria. Tales tenencias propiciaron el asentamiento de Los Castro en Galicia pues continuaron en su poder durante más de un siglo hasta Fernando Ruiz de Castro. Éste murió precisamente en este castillo de Monforte (1304) en plena batalla contra las tropas del Infante Felipe, hermano de Fernando IV. 

El propio Infante Felipe asumiría entonces los señoríos de Lemos y Sarria y, tras su muerte, el Rey Alfonso XI nombró Conde de Trastámara, Lemos y Sarria a su privado don Álvar Núñez Osorio. El linaje de los Osorio continuaría la titularidad del Condado incluso después de convertirse en hereditario (finales siglo XV).

Sin embargo, debido a los continuos enlaces de los Osorio con los Castro (ya no la línea de los Bermúdez de Castro), acabaría imponiéndose el apellido Castro hasta finales del siglo XVIII, cuando Rosa María de Castro, XII Condesa de Lemos, murió sin sucesión. Pasó entonces el título al Dúque de Béjar, posteriormente al duque de Berwick para acabar formando parte de la Casa de Alba.

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